Divagues

A los márgenes de mi cuaderno
a veces salen a jugar
mis más profundos pensamientos.






















Escapes

A veces sólo es cuestión de dejarse acunar
dejarse llevar por un rato
y que las ruedas giren suavemente, dejando los pies en el aire.
Si el terreno es en subida podremos comprobar que la inercia tiene un límite claro
y retomar el pedaleo será naturalmente un reflejo de supervivencia.
Pero cuando la calle baja es fácil deslizarse en un momento tan feliz como fugaz
aunque la experiencia indique que la ruta podía acabar
en algún precipicio.