Ya nunca jamás olvidaremos lo que fuimos


Debe ser mi naturaleza taurina.
Odio los cambios. Los cambios me incomodan, me descolocan, me desnudan.
Me duele dejar atrás.
La muerte de cada cosa es un desastre inevitable.
Hace que mi corazón se vaya despidiendo un poquito más, un milímetro más.
Hace caer la arena en el reloj de una manera estrepitosa.
No entiendo, nunca voy a entender
por qué
me duele 
TANTO
crecer

2 comentarios:

Roky Rokoon dijo...

ah le estas poniendo una onda tremenda

CRECE y dejate de joder

Dos dijo...

crecer es morir de a poco
Uhh, tengo hasta ahi (?)