Escapes

A veces sólo es cuestión de dejarse acunar
dejarse llevar por un rato
y que las ruedas giren suavemente, dejando los pies en el aire.
Si el terreno es en subida podremos comprobar que la inercia tiene un límite claro
y retomar el pedaleo será naturalmente un reflejo de supervivencia.
Pero cuando la calle baja es fácil deslizarse en un momento tan feliz como fugaz
aunque la experiencia indique que la ruta podía acabar
en algún precipicio.

5 comentarios:

Lucas.- dijo...

... tan feliz como fugaz.

Hookdump dijo...

(a riesgo de quedar como un boludo porque quizás posteaste esto por motivos especificos y con una significación particular, aún asi, haré mi comentario)

"... tan feliz como fugaz", para mi no sería tan feliz... El solo hecho de saber que la bajada podría terminar en un precipicio, me daría miedo entregarme a la gravedad, estar a la deriva y sin control, con el temor a chocar con algo o caer por un precipicio.

Cienfuegos dijo...

Que fluya...
Dejalo ser cantaba Mcartney.


Saludos!

Roky Rokoon dijo...

tira ese perfume fumon, te esta haciendo daño, ups

daindart dijo...

E.T.